Darrera da un paso estratégico con la apertura de sus nuevas oficinas en Barcelona, unas instalaciones más amplias, luminosas y funcionales, diseñadas para responder a las necesidades actuales y afrontar con éxito los retos del futuro.
Situada en la Avenida de Cornellá, 100, la nueva sede no solo representa un cambio de espacio, sino también la consolidación de años de crecimiento y la apuesta por un futuro centrado en la innovación, la eficiencia y la sostenibilidad. La empresa mantiene su ubicación en Esplugues de Llobregat, muy cerca de su anterior sede, asegurando una transición fluida y la continuidad en las operaciones diarias.
Las nuevas instalaciones, con más de 500 m², destacan por su amplitud, luz natural abundante y diseño funcional, aspectos que facilitan la coordinación entre las distintas áreas de la empresa y crean un entorno de trabajo más cómodo y orientado al bienestar de todo el equipo. Además, la integración del área logística en el mismo edificio permite agilizar las operaciones y optimizar la gestión de pedidos, ofreciendo a los clientes un servicio aún más rápido y eficaz.
Las oficinas han sido concebidas pensando en la sostenibilidad, con soluciones energéticamente eficientes y materiales de bajo impacto ambiental, reflejando el compromiso de Darrera con la responsabilidad corporativa.
Darrera reafirma su apuesta por seguir creciendo con un nuevo entorno moderno y adaptado a las necesidades de hoy. La nueva sede simboliza un paso firme hacia el futuro y un compromiso renovado con la innovación, la calidad y el servicio al cliente que han guiado a la empresa desde sus inicios.